Hijoputismo

Detrás de la enorme mesa de tu despacho ordenas, mandas, cortas y pegas, pequeño hijodeputa, sin recordar que todo lo que sube baja y que sería feliz del todo haciendo que chupases la punta de mis botas, las mismas que por tu culpa han destrozado mis pies este verano, las mismas que me han hecho estar de acá para allá sin ningún sentido, con el teatro de lo absurdo y de la mentira del que tu eres dueño y sin embargo nunca te has dignado en preguntarnos como estamos o si necesitábamos algo.

Nos amenazas porque crees que con tu poder y tu Jaguar puedes hacer con nosotros lo que quieras. Yo no te gusto y te preguntas porque sigo aquí y podrías joderme bien, sí, pero creeme que la venganza es un plato que se toma fría y he aprendido a odiarte en cada parón de 3 horas en cada pueblo perdido de este puto país al que tú nos mandabas. Todo lo que sube cae, y, pequeño hijodeputa con nombre de gato (lo que hace tu estampa en conjunto aún más ridícula con ese nombre de subnormal que tienes), se que te veré caer y creeme que podré hacer poco, pero algo haré por que caigas y te vea retorciéndote entre la mierda. Los seres como tú deberían de estar apartados de la demás gente de bien por miedo a que se contaminen de la mierda que eres. Mientras bien, sí, peinate el bigote y mesate bien las canas y disfruta. Se que de alguna u otra manera asistiré a tu fin cuando se apage tu negocio y dejes ver lo que realmente eres sin disfraces ni tapujos.

Mierda, sólo mierda...

Escuchando [San Vicente de la Barquera - ¬¬]